7 películas para conocer Canadá y la cultura canadiense
Muchas veces tenemos claro que queremos vivir la experiencia de pasar un curso escolar en el extranjero para ponernos a punto con el inglés y descubrir nuevos horizontes, pero no sabemos muy bien dónde. ¿Cómo es, por ejemplo, la forma de vida y la cultura canadiense? ¿No podríamos echar un vistazo a diferentes destinos antes de elegir dónde vamos a pasar un semestre o un año de nuestra vida?
Pues claro. El cine y la literatura son enormes ventanas abiertas a otras culturas, y el caso canadiense no es una excepción, naturalmente. En los libros y en las películas podemos plantarnos antes unos paisajes, asomarnos a unas vidas y empaparnos de unas realidades cotidianas que físicamente nos pillan un poco lejos o de las que sencillamente no tenemos mucha idea.
Hacer este tipo de exploración es no solamente muy natural, es también muy buena idea. Por eso, aquí te traemos nuestra selección de películas para descubrir y conocer Canadá y su cultura, en general poco conocida para la mayoría. Ojo, que es un país adictivo…
One week (2008)
La cinta de Michael McGowan figura a la cabeza de cualquier lista de películas sobre Canadá, y es por algo. Bueno, por varias cosas: es un recorrido por buena parte del país, retrata bien la esencia canadiense y, sobre todo, es una buena peli.
Tyler Ben (Joshua Jackson) es un treintañero con ínfulas de escritor al que le diagnostican cáncer. Ahí encontrará el motivo para recorrer el país en moto, desde Toronto hasta Vancouver, atravesando praderas, bosques y montañas. Una road movie sobre dos ruedas en toda regla.
Ana de las Tejas Verdes (1985)
Este fue un telefilm basado en la novela homónima (Anne of Green Gables) de L. M. Montgomery de 1908 que alcanzaría un insospechado éxito internacional. Ana es una alegre y parlanchina niña que llega al pueblo de Tejas Verdes adoptada por los hermanos Cuthbert.
Un optimista canto a la inocencia y al descubrimiento infantil del mundo (un mundo rural, idílico, emocionante) que se rodó en la Isla del Prícipe Eduardo y consiguió capturar la belleza tranquila y el espíritu local, más bien atemporal, de esta ancestral provincia del este canadiense.
Los boys (1997)
No se puede aspirar a entender un país sin ver las películas locales que causan furor. Les boys fue un taquillazo con tres secuelas y una serie de cinco temporadas en su estela que atrajo como pocas otras a la comunidad quebequense, esa importante parte de herencia francesa en la cultura canadiense.
Es una peli divertida y con pocas pretensiones de Louis Saia: un variopinto grupo de hombres que converge en un pub participan en una liga de hockey amateur para defender al propietario y el negocio de unos gangsters locales. Mucho estereotipo, mucho Montreal.
Atando cabos (2001)
Esta sí que es una película de paisajes y de ambiente; pero no de las impresionantes Montañas Rocosas o de las Grandes Praderas, que es lo habitual en Canadá, sino de la misteriosa costa Este. En este caso, Terranova, y más concretamente New Bonaventure.
Lasse Hallström transforma este pueblo en el ficticio Kil-Claw como marco para que sus personajes, un padre y una hija con antepasados originarios de la isla, se embarquen en uno de esos viajes de descubrimiento interior entre casas de madera destartaladas, aperos de pesca húmedos y acantilados neblinosos excelentemente retratados.
Scott Pilgrim contra el mundo (2010)
Esto sí que es cultura canadiense “real” en estado puro. Y en este caso se trata de una comedia romántico-fantástica de Edgar Wright. Alternativa, dinámica y bastante interesante que no tiene el escenario como protagonista, pero que no sería lo mismo si estuviera rodada en otro lugar.
Así, la ciudad de Toronto se convierte en uno más de los protagonistas (toma topicazo). Pero sin recrearse en preciosismos; aquí vemos un Toronto real, cotidiano, ajeno al del turismo o la visita de fin de semana. El que podrías encontrar si vienes a pasar un año académico en Toronto. Pero sin poderes sobrenaturales, claro. Suponemos.
Dos polis en apuros (2006)
No te vamos a engañar: la peli no es buena. Desde la selección de autores hasta la traducción del título, pasando por el argumento, Erik Canuel no se cubre precisamente de gloria dirigiendo esto. ¿Por qué te la traemos, entonces? Porque, si vas a estudiar secundaria en Canadá, tienes que conocerla.
Lo interesante de la peli para un extranjero es que retrata esa dualidad anglófona y francófona de Canadá. Los protagonistas son dos policías, uno de Ontario y otro de Quebec, que deben resolver un crimen ocurrido justo en la frontera entre ambas provincias. Imprescindible verla en versión original.
El renacido (2015)
Para que no se diga que no te ponemos una película en la que aparecen los épicos paisajes del Canadá más salvaje. Y, además, buena, como era de esperar cuando dirige González Iñárritu. Hugh Glass (Leonardo DiCaprio) es un trampero que deberá sobrevivir en un territorio hostil para cumplir su venganza.
Kananaskis Country (cerca de Calgary, Alberta), Squamish Valley (no muy lejos de Vancouver, Columbia Británica, aunque parezca el fin del mundo) y otros espacios naturales canadienses son el marco de una película que retrata un tema central en la cultura canadiense: la expansión hacia el Oeste.
Bonus track
Un título más, también muy canadiense, que no podemos dejar de mencionar por su temática estudiantil: Los incorregibles albóndigas (1979) es una pionera (y, aparte de mediocre, hoy sumamente incorrecta) en el cine gamberro de campamento de verano, que fue rodada en Hurricane Lake (Ontario) con Bill Murray como protagonista.