Homecoming

Homecoming: un clásico de la high school en América

Si tienes el ojo puesto en Norteamérica como destino para realizar una estancia de estudios, consolidar tu inglés y vivir una experiencia nueva e independiente en el ancho mundo, te interesará informarte un poco. Hoy te hablamos de una tradición muy típica de cualquier high school en América: el homecoming.

En iEduex creemos que realizar una estancia de estudios lejos de casa es mucho más que estudiar. Es empaparse de un idioma, de una cultura, de una forma distinta de hacer las cosas dentro y fuera del ámbito académico. Es desarrollar competencias sociales, emocionales y funcionales. Es ganar en autonomía y madurez. Es un proceso holístico de transformación, y todo cuenta.

Es muy probable que te topes con esta tradición si vas a estudiar un año escolar en EE. UU. (o también si vives la experiencia de un curso académico en Canadá), así que mejor te explicamos lo que es, porque resulta muy propia de esos dos países. Así no te pillará con el pie cambiado; que no se diga que no te enteras de por dónde andas.

¿Qué es el homecoming?

Por poco que controles de inglés, seguro que te haces una idea del significado básico de este término, y seguro que no vas desencaminado: viene a ser “la vuelta a casa”. Pero a lo mejor todavía no tienes claro a qué se refiere exactamente y en qué consiste. ¿Quién vuelve a casa? ¿Qué casa? ¿A dónde se había ido?

Pues la “casa” aquí es la escuela de secundaria (también lo hacen universidades, y a veces otras insitituciones), y los que vuelven son los exalumnos de esa escuela de secundaria. O sea, que es una celebración para recibir a los antiguos alumnos de un high school. Sí, así de sencillo.

Ah, una nota lingüística para los frikis de estas cosas: verás que cuando alguien se refiera a los antiguos alumnos de una institución educativa hablará de alumni (o alumnae, o alums, depende); resulta que en inglés los que han terminado sus estudios son eso, pero los que están en ello son students, como tú. Para que no te líes.

¿Cuáles son los orígenes del homecoming?

Parece ser que todo esto comenzó por una rivalidad futbolera (de fútbol americano, se entiende) entre las universidades de Kansas y Missouri, allá por 1911. Tras dos décadas de encuentros, el entrenador y responsable deportivo de los Missouri Tigers, Chester Brewer (toda una leyenda) invitó a los exalumnos a “volver a casa” (to come home) para asistir al partido. Quedaron empatados, 3-3.

Desde luego, el resultado es lo de menos. Lo importante es que al encuentro celebrado en Columbia (Missouri) se presentaron unos 10 000 egresados de la universidad. Casi nada. El éxito de la convocatoria hizo furor y encontró eco en prácticamente toda universidad y más tarde high school en América. El resto, como suele decirse, es historia.

Tal vez lo más flipante (y menos conocido) es que en la sede del equipo rival, los Kansas Jayhawks, en Lawrence (Kansas, claro), se reunieron otras mil personas y asistieron a una reproducción mecánica simultánea del partido. O sea, sobre un campo con maniquís móviles se reproducían los lances de juego que llegaban por vía telegráfica. ¿Flipante o no?

Homecoming en America

¿En qué consiste el homecoming?

Avancemos un siglo para averiguar en qué consiste un homecoming en un high school en América hoy en día. Se trata de una celebración anual para reconocer a los antiguos alumnos de la institución. Suele girar en torno a un evento deportivo, normalmente un partido de fútbol americano, y celebrarse a finales de septiembre o principios de octubre.

La idea general es fortalecer los lazos de identidad de los antiguos y los actuales alumnos con el centro educativo. Para ello se suelen celebrar un montón de actividades (sigue leyendo) de tono festivo en las que se realza el papel de los viejos alumnos y… bueno, y los jóvenes se dedican a pasarlo bien (e integrarse en la comunidad educativa, también).

En Canadá también existe el fenómeno, aunque es mucho mas reducido. Lo encontrarás sobre todo en la costa Este y en Ontario. En Labrador y Terranova hay una tradición similar llamada “Come Home Year” pero tiene poco que ver (va de atraer a antiguos alumnos, pero para quedarse a vivir…).

Las partes del homecoming

Apunta todo lo que te puedes encontrar, en diferente orden y con más o menos importancia, en un homecoming en tu high school en América:

  • Evento deportivo. Sea un partido de fútbol americano, baloncesto o incluso soccer (o sea, fútbol de verdad), en general es el momento culminante de la fiesta. Se suele elegir a un equipo muy inferior para que no estropee la fiesta, pero a veces son encuentros de máxima rivalidad.
  • Corte. Entre los estudiantes de último año se elige a un rey y una reina (si el centro es mixto…), y normalmente a toda una “corte”, a veces con títulos aristocráticos y todo, que tendrán un papel destacado en los demás eventos del homecoming.
  • Desfile. A los americanos les encanta un desfile. Los estudiantes eligen al marshal que va en cabeza entre los miembros destacados de la comunidad. Hay banda de música, carrozas y toda la parafernalia.
  • Tailgate/picnic. Eso del parquineo es un invento 100 % americano y aquí lo demuestran con una “fiesta de maletero” en el aparcamiento del estadio antes del partido. También se puede sustituir por un almuerzo campestre colectivo.
  • Dress-up days. Durante los días del homecoming se suele establecer una fiesta temática de disfraces (una cada día), y los estudiantes asisten a clase disfrazados de romanos, años treinta, extraterrestres o lo que se tercie.
  • Pep rallies. Estos eventos (que son de lo más variado) son más típicos que decir “dope”. La idea es fomentar el espíritu comunitario con reuniones en torno a juegos, hogueras, teatrillos satíricos (skits) y un largo etcétera.
  • Banquete y baile. Cómo no. El primero es opcional (y más propio de centros sin tradición deportiva), el segundo no puede faltar. Es, junto con el partido, la culminación de cualquier homecoming digna de tal nombre.

¡Vive tu año de instituto en América a tope!

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