Notas en secundaria en países anglófonos: USA, Canadá, UK e Irlanda
Que si letras, que si porcentajes, que si crípticas combinaciones alfanuméricas… Seguramente lo más extraño a lo que nos enfrentamos al cursar la secundaria en países anglófonos sean los sistemas de calificación. O sea, las notas. Quién iba a decir que para una cosa tan sencilla hubiera tanto lío… Pues lo hay.
Partimos de la idea de que las notas no son ni mucho menos lo más importante en una estancia de estudios en el extranjero; lo que nos interesa es aprender inglés, fortalecer nuestras competencias en un sentido amplio, experimentar en primera persona la inmersión en otra cultura… Pero qué caray, ya que estamos, a todos nos gusta saber qué nota hemos sacado, ¿no?
Pues de eso se trata en este artículo: de mostrarte las diferencias y equivalencias que podemos encontrar entre las calificaciones de Estados Unidos, Canadá, Reino Unido e Irlanda.
Estados Unidos: de la A a la F
Gracias a las películas y series del Tío Sam todos estamos bastante al tanto de que en Estados Unidos los resultados académicos se miden en letras. Así, tendríamos una escala que va de la A a la F, siendo A la mejor nota posible y F la peor (y un suspenso, aunque en algunas instituciones tampoco consideran D como aprobado).
Pero la cosa no queda ahí. Aunque existe una tendencia a uniformizar las calificaciones, esto todavía no es la norma, de manera que los sistemas pueden variar de una institución a otra. Así, encontramos otro sistema alfabético más complejo que añade signos de suma y resta para matizar la nota. Por ejemplo, B+, B y B-.
Pero tampoco queda ahí la cosa. A veces es más fácil o más lógico evaluar por porcentajes, de modo que se han establecido equivalencias entre letras y porcentajes (no universales, que conste) y algo así como una media, llamada GPA. De forma que podemos encontrarnos con algo así:
Letras | Porcentajes | GPA |
A+ | 97–100% | 4.0 |
A | 93–96% | 3.9 |
A− | 90–92% | 3.7 |
B+ | 87–89% | 3.3 |
B | 83–86% | 3.0 |
B− | 80–82% | 2.7 |
C+ | 77–79% | 2.3 |
C | 73–76% | 2.0 |
C− | 70–72% | 1.7 |
D+ | 67–69% | 1.3 |
D | 63–66% | 1.0 |
D− | 60–62% | 0.7 |
F | 0–59% | 0.0 |
Canadá: todo parecido, pero nada igual
El sistema canadiense es muy similar al estadounidense, en cuanto que se usa el mismo sistema de letras, porcentajes y GPA. Además, también se suele considerar D (60%) como la nota mínima para aprobar. Hasta ahí, todo bien.
Sin embargo, en Canadá los sistemas varían de provincia a provincia; nada terriblemente grave, pero el caso es que no son exactamente iguales. A modo de ejemplo, la calificación C equivale a 63–66% en Ontario, 60–66% en British Columbia, 64–66% en Alberta, 60–69% en Saskatchewan, 60–64% en Quebec…
Además, como puede ocurrir también en Estados Unidos, a veces las notas varían en función de otros dos factores:
- La dificultad de la asignatura: si hablamos de cursos AP (advanced placement, o sea, más difíciles) se suele añadir por defecto un + (o sea, un +3’33% en porcentaje, o un +0,33 en GPA).
- La media de la clase: en algunos contextos no se puntúa al alumno de manera absoluta o respecto a su evolución, sino respecto a la media de la clase; si estás entre la quinta parte “de los mejores”, por ejemplo, tienes una A.
Reino Unido: de las letras a las cifras
Todos los sistemas de calificaciones van cambiando a lo largo del tiempo, y la secundaria en países anglófonos no iba a ser una excepción; en el caso británico, el cambio ha sido bastante reciente… Y ha ido por barrios: Escocia queda al margen y el resto no se ponen de acuerdo.
A ver si somos capaces de explicarlo. Desde 1994 hasta 2017 todo era igual en todas partes, había un sistema de letras tal que así: A* (el más alto), A, B, C, D, E, F y G (el más bajo). Bueno, y también una U (ungraded/unclassified). O sea, nueve niveles. El aprobado estaba en la C (o sea, más bajo que en Estados Unidos o Canadá).
A partir de 2017 la cosa se complica. Inglaterra decidió cambiar a un sistema numérico con nueve niveles, siendo 9 el más alto, y manteniendo la U. Pero en la asignatura de Spoken English, no; ahí sacas Pass, Merit, Distinction o Unclassified. En Irlanda del Norte y en Gales se ha mantenido igual, bien por ellos, pero en el primer caso introduciendo una nueva, C*, para equiparar la cantidad de niveles con Inglaterra.
Para terminar, si queremos hablar no del CGSE (General Certificate of Secondary Education) sino del A-Level (el bachillerato, por simplificar), la cosa vuelve a cambiar a letras. Aquí, la escala va de la A* a la E. Por lo menos en este caso da igual Inglaterra que Gales o Irlanda del Norte…
Irlanda: ¿H u O?
El irlandés probablemente sea el sistema más extraño de todos para establecer una calificación en secundaria de los países anglófonos; tanto, que hay bastantes artículos de prensa nativos sobre el tema. Aquí también cambiaron hacer relativamente poco el sistema, en 2017, y se califican diferente los exámenes de secundaria (Junior) y los de bachillerato (Leaving).
En secundaria la cosa es más sencilla: una escala de seis letras (A-F) que se repartían equitativamente los porcentajes a razón de 15% la letra (menos del 10% no puntúa). En bachillerato… El de antes tenía nada menos que catorce calificaciones posibles, pero es que el de ahora tiene dos escalas de puntuación distintas según escojas los exámenes fáciles (Ordinary, O) o difíciles (High, H). Y dejamos aparte otros estudios (formación profesional) para no volvernos locos del todo.
El caso es que en un examen de bachillerato en Irlanda puedes sacar entre un 1 (lo más alto) y un 8, que serán H o bien O en función de lo que elijas (O3 o H4, por ejemplo). Y para liarla más luego todo eso se transforma en puntos, con la peculiaridad de que si hablamos de Matemáticas se le añaden 25 puntos. La tabla es esta:
Nota | Porcentaje | Puntos H | Puntos O |
H1/O1 | 90% – 100% | 100 | 56 |
H2/O2 | 80% – 89.9% | 88 | 46 |
H3/O3 | 70% – 79.9% | 77 | 37 |
H4/O4 | 60% – 69.9% | 66 | 28 |
H5/O5 | 50% – 59.9% | 56 | 20 |
H6/O6 | 40% – 49.9% | 46 | 12 |
H7/O7 | 30% – 39.9% | 33 | 0 |
H8/O8 | 0% – 29.9% | 0 | 0 |
Estudiar secundaria en el extranjero, ¿cuestión de números?
Ya has visto que casi casi lo más difícil de la secundaria en los países anglófonos es enterarte de la nota que te han puesto; ¡el resto de la experiencia es bastante más divertida!